La frialdad alemana vs. La furia española

Este domingo, la Fórmula 1 puede tener un nuevo (viejo) campeón del mundo. Pocos días después de haber anunciado su retiro de las pistas de manera tan imprevista como esperada, Michael Schumacher (Ferrari) tiene la chance de coronarse por octava vez. Por el otro lado aparece el campeón reinante, Fernando Alonso (Renault) quien hasta hace unas semanas se mostraba sonriente y ahora no sabe a quien echarle la culpa de su presente.
Panorama: a falta de dos carreras, ambos tiene los mismos puntos pero el alemán acumula siete victorias y el español seis. De esta forma, a igualdad de puntos al finalizar la temporada, el alemán será el campeón.
Antecedentes: Schumacher ganó en Suzuka en 1995, 1997, 2000, 2001, 2002 y 2004, mientras que Alonso en este circuito apenas consiguió un tercer puesto como mejor resultado. Podríamos decir que es acá donde pesa la experiencia.
Schumi llega mejor, habiéndole arrebatado a Alonso el Gran Premio de China cuando todo era para el de Renault y sin nada que perder, por el contrario, con una chance casi inesperada (después de un arranque tibio) de volver a ser (y retirarse) campeón.
En la vereda de enfrente está Alonso, a quien se ve molesto, declarando no sólo en contra de su equipo sino también de su compañero, Giancarlo Fisichella, y siendo víctima de su propia infidelidad, ya que se sabe desde el comienzo de esta temporada que en 2007 correrá en McLaren (una de las locuras que se permiten en la Fórmula 1 actual).
De esta forma, nunca mejor dicho, se enfrentarán La frialdad alemana vs. La furia española, o uno que ya definió varios campeonatos y que es pura tranquilidad y otro que apenas lleva 86 carreras, que tiene la presión de repetir y de impedir que el “viejo” se lleve lo que es suyo.
Como ya es costumbre, el escenario decisivo vuelve a ser Suzuka, el mismo donde Alain Prost y Ayrton Senna definieron tres campeonatos al punto de llegar a chocarse aun cuando eran compañeros de equipo.
Cómo llegan: Ferrari mejoró el auto, viene de menor a mayor y cuenta con un piloto que no se equivoca (confieso que me tiene harto desde que superó el record de Fangio). Mientras que Renault sintió el golpe de haber sido obligado por la FIA a dejar de usar el mass damper por considerarlo antirreglamentario, y tiene un piloto como Alonso que acusó el golpe de no ganar desde el Gran Premio de Canadá, allá por el 25 de junio, y de ver cómo su rival desde ese momento ganó tres carreras al hilo y luego de dos fechas, otras dos.
Pálpito: no sé si por deseo o porque uno siempre se pone del lado de los perdedores, voy a manos de Alonso. Si quedara sólo una fecha iría por el alemán, pero como resta correr en Brasil creo que hay chances de ver la recuperación de Renault o algún error en Ferrari.