El Ford Escort RS que fue hecho a pedido de la Princesa Lady Di fue subastado por 722,500 libras, lo que equivale a más de u$s 835 mil, lo que sorprendió a la propia casa Silverstone Auctions.
“En estos últimos doce años, nunca tuvimos tantas ofertas telefónicas”, reveló el vendedor Jonathan Humbert, sorprendido por los valores que había alcanzado el remate.
El comprador fue un británico de Cheshire quien no quiso que su nombre trascendiera, y que logró lo que pocos pueden en un contexto como el actual: imponerse a los adinerados oferentes de Emiratos Árabes que suelen quedarse con los lotes más requeridos.
“No nos sorprendería que se venda en más de 100 mil libras (unos u$s 120 mil)”, había dicho Arwel Richards, especialista en autos clásicos de Silverstone Auctions en la previa. Se quedó muy corto, quizás porque no tuvo en cuenta que el auto -pieza única por su estado- salió a remate a horas de que se cumpliera el 25 aniversario de la muerte de Diana de Gales.
Mientras tanto, en EE.UU. alguien decidió pagar u$s 400 mil por la vieja limousine de Elvis Presley, la Lincoln de 1973 que hace algunos años atrás no encontró comprador. Acá quizás también jugó a favor de su vendedor el hecho de que haya tenido tanto éxito la biopic del Rey del rock and roll.
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